Con el sendero marcado hacia Colombia desde diciembre de 2020, la Federación Salvadoreña de Squash (FSS) prepara a sus atletas que participarán en los I Juegos Panamericanos Cali-Valle 2021, que se realizarán del 25 de noviembre al 5 de diciembre.
La delegación salvadoreña está integrada por las squashistas Erika Parker, Katya Aceituno y Marcela Méndez, quienes competirán en las modalidades individual, dobles y por equipos. Las pruebas de squash se desarrollarán en el Club Campestre de Cali del 26 de octubre y al 1 de noviembre.
Parker, de 20 años de edad, y con 11 de practicar squash, es la atleta con mayor experiencia de la representación cuscatleca. En su amplio currículo deportivo, la salvadoreña, quien reside en Estados Unidos, ha logrado en los últimos años cuatro medallas de oro en el Torneo Centroamericano Juvenil; y un oro y dos platas en el Torneo Centroamericano, ambos organizados en El Salvador en 2019.
Asimismo, logró sendos bronces en la modalidad de dobles en el XVII Torneo Panamericano Juvenil, en Toronto, Canadá y en el Campeonato Clasificatorio Panamericano, que se llevó a cabo en el país, este año.
Por su parte, Aceituno es la otra carta nacional, quien con 19 años de edad, diez de ellos en el mundo del squash, obtuvo en 2019 medalla de bronce, un cuarto y quinto lugar en el Campeonato Panamericano Junior, en Cochabamba, Bolivia.
Mientras tanto, Méndez, de 17 años, la más joven del equipo, cuenta en su hoja de vida con un primer lugar en el Torneo Centroamericano de Squash desarrollado en el país, un segundo lugar nacional mayor y primer nacional junior, primer lugar en sub-17 y segundo lugar en la categoría sub-19.
Para el gerente administrativo de la FSS, Jonathan Juárez, los objetivos en los Panamericanos Junior serán alcanzables tomando en cuenta la preparación que están recibiendo las atletas.
“Entre los objetivos, en individual es avanzar hasta la segunda y tercera ronda, en dobles es obtener una medalla de bronce y en la competencia por equipos es mantener la posición, porque tendremos una atleta menos (Parker), quien se va de la competencia por cuestiones académicas”, expresó Juárez.
En esa misma línea, manifestó que para cumplir con la mayoría de los objetivos están trabajando de la mano con el área de psicología del Departamento de Ciencias Aplicadas al Deporte del Instituto Nacional de los Deportes de El Salvador (INDES).
“Estamos haciendo énfasis en la preparación mental de ellas, en su seguridad, lo hacemos con el psicólogo del INDES, César Ramírez, buscamos que tengan confianza para que puedan alcanzar la medalla de bronce en la prueba dobles. Sabemos que hay países fuertes, pero si acá se logró, en Cali no puede ser diferente”, confirmó Juárez.
Para Katya Aceituno, defender los colores azul y blanco en los I Juegos Panamericanos la hace sentirse una atleta privilegiada.
“Pues feliz, y la verdad orgullosa de mí misma, ya que no fue fácil la clasificación, me tocó trabajar duro todos los días (2 a 3 horas de entrenos), ir día a día conociendo nuestro juego y el de los rivales, aprendiendo las tácticas y analizando los partidos”, expresó Aceituno.
Katya, quien hará pareja en dobles con Parker, también explica cuál es el proceso de preparación que ha tenido con su compañera de competencia.
“Erika juega en Estados Unidos, ella hace sus propios entrenos, pero como ya tenemos años de estar juntas, ya nos entendernos de diferentes tipos de juego y es algo que nos beneficia, y eso nos da ventaja a pesar de la distancia”, aseguró la atleta.
Por su parte, Méndez, expresó la alegría de competir en la justa panamericana, por lo que aseguró que luchará por alcanzar un resultado positivo para el país.
“Emocionada, feliz de representar a El Salvador en estos Primeros Juegos Panamericanos Junior en la historia. Mis expectativas personales son dar lo mejor de mí, obtener un resultado que aporte al crecimiento de nuestro deporte”, afirmó Méndez.