La Administración de Control de Drogas estadounidense (DEA, por sus siglas en inglés) ha revelado que diversos cárteles de narcotraficantes mexicanos utilizan las redes sociales para ofrecer y vender fentanilo y medicamentos falsos en Estados Unidos, plataformas que les otorgan una gran flexibilidad para el tráfico de sustancias ilícitas.
“Los grupos criminales mexicanos están utilizando la herramienta perfecta para traficar narcóticos: las aplicaciones de redes sociales que están disponibles en cualquier teléfono inteligente”, aseguró Anne Melissa Milgram, actual administradora de la DEA.
Asimismo, aseguró que el tráfico mediante estas plataformas nutren la actual epidemia de sobredosis: “Están utilizando estas plataformas para llenar nuestro país de fentanilo. La facilidad con la cual los traficantes operan en redes sociales y otras aplicaciones móviles populares están alimentando la epidemia inédita de sobredosis en el país”, dijo la funcionaria.
La DEA informó que desplegará un operativo para identificar a las entidades y personas que utilizan redes sociales para expandir el poder de las organizaciones de narcotráfico, pues se comunicó que las principales aplicaciones donde se realiza este tipo de actividades son TikTok, Instagram, Facebook, YouTube y Messenger.
Milgram aseguró que los narcotraficantes mexicanos utilizan las redes sociales para ingresar al mercado estadounidenses productos provenientes principalmente de China:
“Las redes criminales de México están produciendo fentanilo y derivados en masa, así como fármacos falsos que utilizan químicos que provienen principalmente de China. Estos medicamentos apócrifos frecuentemente contienen dosis mortales de fentanilo. La DEA ha determinado que cuatro de cada 10 píldoras falsas analizadas por este organismo contienen al menos dos miligramos de fentanilo, una cantidad considerada mortal”, mencionó la administradora de la DEA.
Las dosis de estos medicamentos falsos son réplicas casi idénticas a drogas de ingesta popular en los Estados Unidos, como lo son Oxitocina, Percocet, Vicodin, Adderall, Xanax y algunos otros.
“Estados Unidos tiene niveles sin precedente de fentanilo en las comunidades del país. En el 2021, la DEA incautó 20.4 millones de píldoras falsas”, manifestó Milgram, quien también informó que se han decomisado más de 680 kilogramos de fentanilo en el país tan sólo en los últimos cuatro meses del año.
Las autoridades estadounidenses han manifestado su preocupación por la epidemia de sobredosis en su territorio, pues en el periodo de 12 meses que comprendió desde abril del 2020 al mismo mes del 2021, se registraron alrededor de 100,306 muertes por raciones excesivas en el consumo de drogas, un incremento del 28.5% comparado con las 78,56 muertes en el año pasado.
Las políticas y programas del control antidrogas de aquél país se han centrado en el combate a los opiáceos sintéticos, principalmente el fentanilo, pues estas sustancias fueron responsables del 64% de las muertes por sobredosis durante este periodo, lo cual incrementó un 49% con respecto al año pasado.
Los cárteles mexicanos son de las principales organizaciones que introducen el fentanilo a los Estados Unidos, pues incluso tienen nexos con los mayores comerciantes de esta sustancia y sus precursores, quienes operan desde China y Hong Kong.
Según datos proporcionados por las dependencias estadounidenses, el perfil de los consumidores de drogas también ha cambiado con el paso del tiempo, pues en la década de los setentas, la mayoría de los adictos eran negros y asociados con la violencia, arrestos y las medidas duras de las autoridades; mientras que hoy en día 94% de quienes compran e ingieren estas sustancias son blancos, mientras que sólo el 1.4% son negros.