Estados Unidos y la OTAN ofrecieron una desescalada militar a Rusia para resolver la crisis sobre Ucrania pero no renunciaron a la posible entrada de este país en la Alianza Atlántica, según las cartas que Washington y Bruselas enviaron al Kremlin.
Ambos argumentos, publicados por el diario español El País, aparecen en las respuestas por escrito de EEUU y la OTAN enviadas a Rusia para tratar de resolver las tensiones entre los dos bloques, después de que Moscú exigiera cerrar la puerta a la incorporación de Ucrania a la OTAN y la firma de un acuerdo de seguridad con Europa.
Según el rotativo, que publica fotos obtenidas de los documentos confidenciales, tanto Washington como la Alianza ofrecen a Putin negociar acuerdos de desarme y medidas de confianza en diferentes foros que incluyen a la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), el Diálogo sobre Estabilidad Estratégica EEUU-Rusia y el Consejo OTAN-Rusia.
“Considerando el sustancial, unilateral e injustificado despliegue militar en curso en y alrededor de Ucrania y Bielorrusia, llamamos a Rusia a desescalar inmediatamente la situación de manera verificable, oportuna y duradera”, señala la OTAN en su respuesta a Moscú, informó El País.
“La posición del Gobierno de Estados Unidos consiste en que solo se podrán alcanzar progresos en estos asuntos (desarme y medidas de confianza) en un entorno de desescalada de las acciones amenazantes de Rusia hacia Ucrania”, advierte, por su parte, Washington.
De esta forma, el gobierno de Joe Biden se muestra abierto el diálogo y al compromiso mutuo para reducir la tensión en la región, dejando por escrito sus disposición a establecer medidas recíprocadas de transparencia y propone el compromiso de que ambos países se abstengan de desplegar sistemas ofensivos de misiles lanzados desde tierra y fuerzas permanentes con misión de combate en el territorio ucraniano.
Descartan cerrar las puertas a Ucrania
El documento de Washington deja claro que “sigue apoyando firmemente la política de puertas abiertas de la OTAN”, por lo que no excluye la futura incorporación de países como Ucrania o Georgia a la Alianza. Además precisa que, en todo caso, este asunto debe abordarse en el Consejo OTAN-Rusia (NCR, por sus siglas en inglés).
También el texto de la OTAN reafirma su política de puertas abiertas y subraya el derecho de todos los Estados a elegir sus acuerdos en materia de seguridad “libres de interferencias”, agrega el documento confidencial al que ha tenido acceso el rotativo.
Con la situación a punto de estallar, EEUU dejó claro que no permitiría un avance ruso sobre territorio ucraniano: “Una escalada rusa para forzar la posición o una agresión adicional contra Ucrania obligarán a Estados Unidos y a nuestros aliados a reforzar nuestra postura defensiva”.
La OTAN también destacó que Rusia “ha roto la confianza” de cooperación y ha desafiado los principios fundamentales de la arquitectura de seguridad global y euroatlántica, pero aún así se le ha ofrecido un marco institucional que no ha sido puesto sobre la mesa a ningún otro socio.
En medio de la tensión, Estados Unidos y Rusia retomaron este martes el diálogo directo, aunque sirvió para poco más que para reiterar sus diferencias.
El presidente ruso, Vladimir Putin, aún no ha contestado a las dos cartas pero advirtió a Occidente, tras recibirlas, que ha ignorado las garantías de seguridad que había exigido Moscú. Entre ellas figuran poner freno a una mayor expansión de la OTAN, en particular a Ucrania y Georgia, y el cese de toda cooperación militar con las antiguas repúblicas soviéticas.
El mandatario ruso dejó la puerta abierta para el diálogo, pero aseguró que este debe tener en cuenta las preocupaciones rusas sobre la seguridad en Europa que Moscú planteó a EEUU y la OTAN.