seguro, informa la prensa local.
Lawrence Rudolph, de 67 años, está acusado de fraude postal por supuestamente haber elaborado un esquema para defraudar a compañías aseguradoras mediante declaraciones falsas, en las que constaba que la muerte de su cónyuge fue resultado de un accidente. Bianca Rudolph falleció en octubre de 2016 por un disparo de arma de fuego, durante un viaje de cacería en Zambia y su cuerpo fue cremado en ese país.
Una persona cercana a la difunta pidió al FBI que investigara la muerte, afirmando que Lawrence había estado involucrado en relaciones extramatrimoniales y tenía peleas con su difunta esposa por asuntos relacionados con dinero. Además, argumenta que la cremación no era el deseo de Bianca y que Lawrence nunca habría aceptado el divorcio para no perder parte de su patrimonio.
Detalles del caso
Según la denuncia penal, Rudolph presentó solicitudes de indemnizaciones a siete compañías de seguros por más de 4,8 millones de dólares, y sus abogados enviaron los respectivos documentos a algunas de esas empresas a través del servicio de logística FedEx. Además, las investigaciones establecieron que la primera póliza de seguro de vida para Bianca fue comprada aproximadamente en el año 1987, y actualizada en el 2016, siendo el acusado el principal beneficiario.
La Policía de Zambia estableció que la muerte de la mujer fue resultado de un accidente, y Lawrance había declarado que sospechaba que el arma se disparó mientras su esposa la guardaba en el estuche.
La defensa de Lawrance, que fue arrestado el pasado 23 de diciembre, califica de «escandaloso» el enjuiciamiento contra el dentista y denuncia que «el Gobierno está tratando de fabricar un caso». Afirma también que Rudolph es inocente y que no tenía motivos financieros para matar a su esposa, con quien había firmado un acuerdo prenupcial, que establecía que él no perdería mucho de su patrimonio en un posible divorcio.
Además, esta semana los abogados de Lawrance presentaron una moción pidiendo su traslado de un centro de detención en Colorado a Arizona, donde tiene una casa, argumentando que tiene condiciones médicas desfavorables y el caso en su contra es circunstancial. El caso de fraude postal federal conlleva una pena de prisión de hasta 20 años si es declarado culpable.